“No volveremos a vender por debajo de los costos de producción”, la afirmación la hizo el presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro), Antonio Pestana, al expresar la desesperación que existe entre los productores de maíz blanco, por la indefinición de precios por parte del Gobierno nacional.
“Los maiceros, específicamente los de maíz blanco, hemos tomado la decisión que para poder favorecer al pueblo venezolano no venderemos nunca más por debajo de los costos de producción; es preferible que nos quiten el maíz, que nos lo confisquen, antes de vender nuevamente por debajo de los costos”, recalcó al tiempo que indicó que estarían en riesgo de perderse en los silos unas 500 mil toneladas del rubro.
Pestana aseguró, que con esta decisión no están cayendo en ilegalidad, “ser legal significa garantizarle la rentabilidad a los programas, y es por eso que nosotros conversamos con los diferentes eslabones de la cadena para poder definir una acción, ante la indefinición que el Gobierno nacional tiene”.
El presidente de Fedeagro agregó, que la falta de rentabilidad ha llevado a que la siembra de maíz en el país haya caído de forma alarmante en los últimos años. “En el 2013 la siembra nacional se correspondía al 66,6% de las necesidades de los venezolanos; en el 2014 bajó al 60%; en el 2015 a 41%; y este año 2016 fue apenas del 33%”, detalló.
Pestana explicó, que si el Gobierno fija valores económicos que le funcionen a todos los eslabones de la cadena, “los circuitos agroalimentario se salvan, los 16 estados que dependen de la agricultura mejoran; la soberanía agroalimentaria expresada en la Constitución comenzará a tener realmente valor, y el Estado por cada dólar que invierta en producción nacional dejará de invertir 5 dólares en importación de alimentos. La única derrotada sería la inflación, que es a quien debemos combatir los venezolanos”, destacó.
Propuesta
El representante gremial puntualizó que la propuesta es ofrecer una harina de maíz precocida al consumidor a 770 bolívares, lo que representa –apuntó- el 30.8% del equivalente de la que está llegando de Colombia, que cuesta 69.2% más; además, es el 25.7% de los Bs. 3 mil en se vende el producto en el mercado informal (bachaqueros). “A todas luces, se ve que la mejor oferta es la nuestra”, aseveró.
“Lo mismo ocurre con la caña de azúcar, el costo de producción para que toda la cadena agroalimentaria tenga rentabilidad es de 1.530 bolívares por kilo, que representa el 51% del valor alternativo que está llegando de Colombia que es de Bs. 3 mil, y el 38% de los Bs.4 mil que se está vendiendo en el comercio informal”, puntualizó.
Pestaña señaló, que de no obtenerse un pronunciamiento en los próximos días, se podrían estar realizando acciones de calle en los estados Bolívar, Guárico, Barinas, Cojedes, Portuguesa y Monagas, donde los productores han expresado su deseo de tomar las calles y avenidas en defensa de la soberanía agroalimentaria.
También el café
El presidente de Fedeagro se refirió a la situación que están padeciendo los caficultores, luego que se bajara el precio del quintal en un 30%. “No es posible, que luego que el productor estaba cobrando entre 140 y 150 por quintal, ahora a duras penas llegue a 90, sumado a la problemática que tienen para conseguir dinero en efectivo en los bancos, viéndose obligados a perder entre un 10 y un 15% cada vez que cambian en los comercios”, dijo.
Evidentemente –añadió Antonio Pestana- no hay rentabilidad para el productor, pero resulta que ahora el café en Caracas está costando 14 mil bolívares, porque se trata de producto importado; entonces, si de verdad somos nacionalistas ayudemos a la cadena de producción de alimentos de Venezuela.
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